Homenaje a las docentes fallecidas: “Para que su recuerdo se mantenga vivo es que iniciamos esta cruzada”
Un grupo de docentes atravesaron la provincia en bicicleta con motivo de homenajear a las docentes Jorgelina Ruiz Díaz y María Cristina Aguilar, fallecidas en un trágico accidente.
El grupo “Docentes de Chubut a pedal” se propuso atravesar la provincia en bicicleta en el marco de la lucha de los trabajadores estatales y como una forma de homenajear a las docentes Jorgelina Ruiz Díaz y María Cristina Aguilar, quienes perdieron la vida en un accidente en la ruta 3 cuando volvían de una manifestación de trabajadores estatales. “Ellas son las protagonistas de esta cruzada, por ellas, por su entrega, para que su recuerdo se mantenga vivo es que iniciamos esta cruzada” expresaron.
Salieron el martes 24 a las 8 de la mañana de El Hoyo junto a una caravana de autos que los acompañó hasta el cruce de El Maitén, donde se instaló un cartel en homenaje a las docentes. Tras recorrer más de 700 km, ayer finalmente llegaron al acampe en la Legislatura de Rawson, donde los recibió una multitud con aplausos y abrazos.
Además, ayer 27 de septiembre fue el aniversario de nacimiento de Jorgelina quien hubiera cumplido 55 años, de los cuales dedicó 34 años a la educación: en su Corrientes natal ejerció como auxiliar de educación durante 15 años y dos años más como auxiliar de dirección; luego ejerció la docencia en Chubut durante 17 años.
Bicicleteada por la educación
Según relataron los ciclistas en su página de viaje, en todas las localidades por las que pasaban los recibieron muchas personas, quienes además de apoyar la iniciativa, les compartieron comida, bebida y alojamiento. “En cada pueblo que hemos recorrido la gente nos cuenta sus necesidades y nos entregan banderas para que llevemos a Rawson, cual embajadores de la Lucha. Estamos sumamente agradecidos porque no esperábamos tantísimo amor y entrega” expresaron.
En este marco, señalan que “este gobierno nos puede sacar muchas cosas pero nunca la alegría que provoca la unión de las almas que persisten en conquistar un bien común”.
En el relato del viaje, comentaron que antes de llegar a Esquel, a uno de los ciclistas se les pinchó una rueda, por lo que tuvo que seguir corriendo hasta llegar a la ciudad y repararla. Hicieron noche en Tecka y el miércoles continuaron hasta Paso de Indios y siguieron hasta Los Altares. El jueves se les pinchó una goma y tuvieron que retrasar la salida, luego viajaron hasta Las Plumas y finalmente Dolavon. El viernes temprano partieron para Gaiman y luego la capital provincial donde los recibió una multitud en el acampe y así dieron por finalizada su travesía.
