Plaza Las Orquídeas entre la destrucción vandálica y un mantenimiento inexistente

Luego de que gracias al esfuerzo del municipio y la colaboración de algunos vecinos, se lograra un paseo verde envidiable, con juegos para los más pequeños, amplios corredores internos para la caminata familiar o para disfrutar con patines, mesas de cemento con tableros para jugar a las damas o al ajedrez, la plaza Las Orquídeas, en el centro del barrio del mismo nombre, hoy “se cae a pedazos” y se va cubriendo de yuyos.

Algunos vecinos reclaman por aquel otro paisaje de césped, de colores en las bancas –que han sido rasqueteadas- o sentarse a compartir una partida de ajedrez pero, la mayólica de los tableros fueron arrancadas y hasta se han tomado el “trabajo” de demoler parte del pie de la “mesa de cemento” que esta construida para soportar inclemencias del tiempo, pero no las manos dañinas, y el reclamo parece que no se escucha y el vandalismo no se detiene.

Además del vandalismo, y la destrucción total de esas mesas de cemento que ayer se observó totalmente destruida, el olvido también se transforma en el permiso para la pérdida de lo que fuera un hermoso paseo; el espacio se va perdiendo a pesar de los reclamos de algunos y del accionar casi delictivo de otros.

Pero más allá del cuidado que debería realizarse desde la propia vecinal o desde algún sector del municipio, es lamentable el accionar de los propios vecinos del barrio, porque es dudoso que los daños fueran provocados por gente ajena al barrio, algunos de los cuales ayer se lamentaban por la pérdida total de una de las construcciones que, supuestamente, era para disfrutar por todos.