Automovilista estaba tan ebrio que no pudo soplar la pipeta del test de alcoholemia

Un hombre de 64 años manejaba en estado de ebriedad por el centro de la ciudad, embistió un rodado estacionado y escapó. Tras ser interceptado intentaron practicarle el test de alcoholemia pero no pudo soplar pipeta y fue demorado. Posteriormente se constató que conducía con 1,76 gramos litro de alcohol en sangre.

Ayer cerca de las 2 de la madrugada personal de la Comisaria Primera de Policía recibió un alerta que indicaba que un Renault Duster, comandado por un hombre en estado de ebriedad había embestido un Ford Fiesta Kinetic que estaba estacionado en inmediaciones de las calles España y San Martín en el centro de la ciudad, y tras ello se había dado a la fuga.

Efectivos policiales salen en búsqueda del mismo, logrando interceptarlo en Alsina y Ameghino, siendo el único ocupante del vehículo -L.V. de 64 años de edad- quien, de acuerdo con el relato policial, contaba con fuerte aliento etílico, dificultades motrices y para hablar, determinándose solicitar la presencia de personal de Tránsito municipal.



Una vez allí intentaron practicarle el test de alcoholemia pero fue imposible dado que luego de varios intentos no logró soplar la pipeta, por lo que fue demorado y trasladado a la dependencia hasta recuperar la lucidez para resguardar su identidad física y la de terceros.

Poco después y ya en la dependencia policial realizaron el test arrojando un resultado de 1,76 gramos litros de alcohol en sangre, informó la policía.

Se labró el acta e infracción correspondiente, se secuestró la unidad automotor quedando a disposición del Tribunal de Faltas y finalmente fue entregado el hombre a su sobrino poco antes de las 4:45.