La Facultad de Ingeniería diseña un prototipo de respirador artificial

Fue un pedido del Hospital Regional y del Sanatorio de la Asociación Española en caso que sea necesario desarrollar en serie equipos para Asistencia Ventilatoria Mecánica.
La Facultad de Ingeniería de la UNPSJB diseñó y construyó un prototipo de respirador artificial para colaborar con la pandemia de Covid-19, en la cual trabajan docentes y personal de apoyo de laboratorios de las carreras de Ingeniería Electrónica y Mecánica.

El proyecto comenzó cuando el Hospital Regional y el Sanatorio de la Asociación Español solicitaron a la Universidad que estudie la factibilidad de construir equipos para Asistencia Ventilatoria Mecánica (AVM), popularmente denominados respiradores artificiales. Ante ese requerimiento, la Facultad desarrolló un equipo AVM apto para situaciones que necesiten intubación intertraqueal, como sucede en los casos graves de Covid-19.

El prototipo ya está listo y en caso que fuera necesario según lo amerite la situación sanitaria, podrán realizar la construcción de los mismos. Desde el equipo de trabajo aclararon que si bien el pedido surgió a través de dos instituciones: “La idea es ponerlo a disposición de la sociedad en general en caso de que fuera necesario en cualquier localidad que atraviese por una situación crítica”.

Respirador artificial

Según explicaron desde la Facultad, el equipo desarrollado: “Es capaz de suministrar mezclas de aire y oxígeno puro en diferentes proporciones. Posee dispositivos de seguridad para medir presión de suministro a los pulmones, sistema de detección de fugas, medición de flujo inspirado y flujo exhalado.

Posee una válvula con la capacidad de controlar la presión en los pulmones al final de la espiración (conocida como válvula PEEP). También es posible seleccionar la fracción de oxígeno inspirado (FiO2) dependiendo de los requerimientos de cada paciente”.

Este equipo puede complementar el servicio que brindan los respiradores comerciales en caso de que fuera necesaria su producción en serie ante la eventualidad de una crisis sanitaria como la que han atravesado otros países.

Construcción de bajo costo

El objetivo era lograr un equipo de bajo costo, con posibilidad de construirse en las cantidades necesarias y sin necesidad de suministros de la industria de equipos médicos, ya que la experiencia ha demostrado que la disponibilidad de mercado puede ser insuficiente para cubrir la demanda.

En este sentido, cabe mencionar que muchos de los desarrollos que aparecieron a nivel mundial en esta crisis utilizan como base equipos médicos como el AMBU, este equipo es una bolsa resucitadora utilizada ante la emergencia accionado manualmente por quien asiste al paciente.

Todos los gastos de la construcción fueron solventados con recursos de la Facultad de Ingeniería que surgen de trabajos que habitualmente se realizan a demanda de la industria.

Equipo de trabajo

El grupo que participó tanto en el diseño como en la construcción está constituido por: Santiago Barrios, Orlando Herrera, Alejandro Münnemann, Gerardo Ahrtz, Claudio Merelli, Rodolfo Gómez, Pedro Kolodka y Daniel Barilá.

También actuó como consultor médico permanente el médico intensivista José Celia, quien se desempeña en el Servicio de Terapia Intensiva del Hospital Regional y el Sanatorio de la Asociación Española.