Impulsan proyecto de ley para dar despedida digna a los pacientes con Covid-19
En agosto el Ministerio de Salud aprobó un protocolo para que familiares de pacientes terminales con Covid-19 puedan despedirlos en los centros de salud donde se encuentran internados y hasta la fecha lo han aplicado en CABA, provincia de Buenos Aires y Mendoza.
En Chubut también se propone la creación de un “Programa de acompañamiento a las personas en situación de finalidad de vida” para que se aplique en todos los centros de atención de salud pública y privada, para que los familiares puedan despedirse de los pacientes con covid en los casos donde la situación es determinada por los médicos como irreversible o con pocas posibilidades de reversión.
Estado del proyecto de ley
La diputada María Andrea Aguilera, del bloque Juntos por el Cambio, presentó el proyecto en la Legislatura donde aún no es tratado debido a que por el momento no se están llevando a cabo las sesiones legislativas.
Asimismo a nivel local la concejal del mismo partido, Graciela Saffirio, presentó en el Concejo Deliberante un proyecto de expresión de deseo en acompañamiento a esta iniciativa. El mismo ingresó el último jueves y pasó a la Comisión de Salud que lo tratará en los próximos días.
En diálogo con Crónica, Saffirio explicó: “es un proyecto de expresión de deseos para que la Legislatura provincial apruebe el proyecto de ley que se presentó hace dos semanas. El proyecto prevé la creación de un programa de acompañamiento a personas en el final de su vida, en principio presencialmente y extraordinariamente en forma virtual, por alguna persona de su entorno afectivo, en este ámbito de pandemia de covid”.
Asimismo expresó: “espero el acompañamiento de mis pares en el Concejo y de los diputados provinciales”.
Último adiós
La diputada Aguilera planteó que “quitar la posibilidad de un acompañamiento humanizado en los últimos momentos de vida de un ser querido resulta una vulneración al derecho a la salud íntegra protegido constitucionalmente”.
Señaló que “existen protocolos sanitarios para concretar este acompañamiento con seguridad y bajo riesgo para los involucrados, que son coherentes con los derechos humanos, con el respeto y garantía absoluta a la dignidad humana”.
En este marco, la concejal Saffirio confirmó que “todo esto es respetando protocolos, no estamos hablando de que abran las puertas de los hospitales y todos vayan a despedir a su familia, no es ese el concepto, sino que a través de la autoridad de aplicación que sería el Ministerio de Salud, con protocolos que determinen las clínicas y hospitales, se pueda llegar al último adiós”.
La despedida se realizaría “previendo las medidas de seguridad: protección, barbijo, máscaras, trajes; y para los casos donde no sea posible por la cuestión que sea que determinen los médicos, que se prevea la comunicación por videollamada o por llamada telefónica” indicó.
Requisitos
En los lugares donde se aplicó este protocolo el mismo establece que solo puede acceder un acompañante por paciente, que debe gozar de buena salud y no estar entre los grupos de riesgo, entre otros requisitos que varían según la legislación de cada jurisdicción. En todo momento deberá utilizar guantes descartables, camisolín manga larga, barbijo médico quirúrgico y protección ocular.
Entre otras cosas, el ministerio recomienda a los centros de salud armar un equipo específico para estas situaciones que debería incluir médicos, enfermeros, profesional de salud mental y profesional social (trabajador social por ejemplo).
El caso de Peric y el pedido de su familia
En Comodoro Rivadavia la falta de protocolos para despedir a pacientes terminales se puso de manifiesto cuando la familia de Héctor Raúl Peric solicitó al Hospital Regional poder despedirse del hombre, que tenía 88 años y un cuadro grave e irreversible. La petición la impulsaron sus nietas y en concreto querían que su abuela pudiera despedirse de su marido.
Después de viralizar la situación en redes sociales y los medios, desde el nosocomio le explicaron a la familia que la despedida no sería posible, dado que no cuentan con los recursos necesarios para llevar a cabo un protocolo de este tipo.
Además la mujer se trataba de una adulta mayor y contacto estrecho que debía permanecer en aislamiento, aunque de todos modos sentó precedente para plantear el tema en la ciudad. “Fue uno de los casos que me motivó, si bien no me tocó de cerca y no conocía a esa gente, sí como ciudadana y teniendo la posibilidad de legislar” expresó al respecto la concejal Saffirio.
En este sentido la edil consideró que el objetivo del proyecto de ley es “que la familia pueda tener una despedida, un último adiós, me parece que todos lo merecemos y le hace bien tanto al paciente como a la familia. Con esto que está sucediendo por ahí nos olvidamos de la parte humana”.
Asimismo recordó que “la nieta se movilizó tratando de llegar a alguien del hospital para despedir a su abuelo, era una cuestión casi imposible, entonces todo esto tiene que estar previsto y regulado en un programa de acompañamiento para los enfermos”.
