Con testimonios y videos recordaron a las docentes Jorgelina y Cristina

El gremio docente ATECh organizó una transmisión en vivo a través de internet que contó con distintas voces de compañeras de trabajo y familiares de las docentes fallecidas.

La Regional Sur de ATECH preparó un homenaje para las docentes Jorgelina Ruiz Díaz y María Cristina Aguilar, fallecidas el 17 de septiembre de 2019 cuando regresaban de una manifestación en Rawson.



A partir de las 16 horas el gremio comenzó una transmisión en vivo por internet donde con diferentes testimonios recordaron a las docentes fallecidas. En la misma participaron sus compañeras de trabajo, familiares y gremialistas.



Por otro lado, en otras localidades de la provincia como Río Mayo, Sarmiento y Cholila, también hicieron sus homenajes a las docentes, asimismo en Trelew estaba prevista una actividad que se debió suspender por las condiciones climáticas.

El aniversario del fallecimiento se recuerda en un contexto de pandemia con clases en las aulas y en el que aun los docentes, junto al resto de trabajadores del estado, no han percibido la totalidad de sus haberes, ya que a muchos se les adeuda julio y agosto además del aguinaldo.

En recuerdo de las docentes

Una de las personas que participó del homenaje fue Marcia Jara, directora de la Escuela 738 donde trabajan ambas docentes fallecidas. Jara expresó que: “todos aquellos que tuvimos el privilegio de conocer y compartir con Cristina y Jorgelina coincidimos en recordar hermosos recuerdos de ellas, siempre alegres y entusiastas aunque a veces la realidad era tan injusta”.

Asimismo señaló que: “en el Día del Profesor recordamos a dos excelentes compañeras que comprendieron que enseñar era un vínculo amoroso con las y los estudiantes, y que cuando surgía una situación de vulnerabilidad que les preocuparan eran las primeras en comentarlo y pedir ayuda para solucionarlos”. Las describió como buenas docentes, compañeras, amigas y luchadoras; “se fueron defendiendo el derecho a la educación pública, gratuita y de calidad en condiciones óptimas, con salarios dignos en tiempo y forma. Al día de hoy seguimos luchando ya que el estado provincial y nacional siguen sin poder garantizarlo” afirmó.

También recordó a las tres docentes que resultaron heridas en el vuelco, en ese entonces tenían la obra social SEROS cortada y recordaron que varias personas colaboraron con los gastos médicos tras el accidente.

“El legado está en los estudiantes que las siguen recordando”

Cristina terminó el secundario de adulta y se recibió de profesora de Economía en el Instituto Superior 807, tenía tres hijas y cinco nietos. Jorgelina tenía seis hijos y cuatro nietos, trabajaba de portera en Corrientes mientras estudiaba el secundario y luego se recibió de maestra. Ambas docentes estudiaron y se formaron de adultas y se desempeñaban en la Escuela 738 del barrio San Cayetano.

La directora expresó que “ambas tenían mucha empatía con sus estudiantes, esta es una comunidad de familias muy trabajadoras, con muchas situaciones de vulnerabilidad. u rol docente iba más allá de la enseñanza estricta de su tarea, sino que también se ocupaban de sus estudiantes, de su bienestar” en este sentido sostuvo que “el legado está en los estudiantes que las siguen recordando”.

“Fue muy duro, pero pudimos salir”

Jorge Mansilla es el esposo de María Cristina Aguilar, y ayer participó del video homenaje que hicieron en su memoria. Comentó que se conocieron en la adolescencia cuando estudiaban en el Colegio Perito Moreno y desde allí estuvieron juntos durante cuarenta años. “Cuarenta años ininterrumpidos junto a ella, tuvimos tres hijas, cinco nietos, dos de los últimos no los pudo ver” contó.

Su nieto mayor tiene veinte años y Mansilla señala que por esta razón puede ser que ella trataba a sus alumnos como si fueran sus nietos; “eran como sus nietos, por eso sería que tenía ese trato tan particular. Es de lo que hablaba todo el día, de ‘sus chicos’, esas eran sus palabras” expresa. También la recuerda organizándose en esos momentos de lucha docente, consiguiendo mamelucos térmicos, cintos y botines.

Sobre el día de la tragedia recordó: “Ese día ella estaba sin dormir, muy cansada, Cristina siempre nos informaba cada paso que hacía y ese día no nos avisó, esas cosas que pasan. Calculábamos que llegaba a las ocho de la noche, salí a comprar para hacer la cena para esperarla. No teníamos noticias y después aparece en un portal que hubo un accidente”. Luego de momentos de incertidumbre, una de las docentes se comunicó para informarles de la noticia. “Fue muy duro, pero pudimos salir y todos los días desde esa noche trágica estamos juntos, dándonos ánimo y en cada cosa que hacemos decimos ‘mamá hubiera querido que sea así’ y con eso vivimos” expresó Mansilla.

También resaltó que a pesar de la lucha del año pasado y los fallecimientos, aún la situación sigue igual o peor; “da la apariencia de que la lucha, el sacrificio y su muerte, no sirvió de nada” lamentó el hombre y agregó que “tenemos esperanza, la familia y sus amigos, que esto realmente se termine”.