Jorge Newbery contará con Pablo Barrientos

La dirigencia del Club Jorge Newbery confirmó que Pablo César Barrientos será jugador del club cuando se reanude la competencia del Torneo Regional Federal. No seguirán Cristian Iramaz, Matías Hidalgo, Jorge Aynol y Ricardo Chavarri.

La posibilidad de que Pablo Barrientos, quien se desvinculó en junio pasado de Nacional de Montevideo juegue en Jorge Newbery, está prácticamente confirmada. El volante ofensivo se convertirá en el refuerzo más importante del Lobo.

Por otra parte, siguen las tratativas para lograr la incorporación de Jesús Méndez, además de gestionar la incorporación de un volante central, un delantero y otro marcador central.

Pablo De Miranda a Italia

El defensor Pablo Timoteo De Miranda acordó su traspaso a la serie "D" del futbol italiano. El jugador nacido en Comodoro Rivadavia pero con un amplio paso por diferentes clubes, había retornado a Comodoro para ser parte del plantel de la Comisión de Actividades Infantiles en el Torneo Regional.

De Miranda (34 años) surgió de la cantera "azzurra", pero también jugó en Toros de Celaya, Blooming de Bolivia, Instituto de Córdoba, Tigre, Ferro, Defensa y Justicia, entre otros.

Leo Valdez dejó Huracán

El volante ofensivo que jugó en las formativas de Racing Club y que esta temporada había llegado a Huracán de nuestra ciudad, confirmó a través de las redes sociales, su vínculo con Chaco For Ever.

El jugador tuvo un buen paso por el Globo y se había convertido en uno de los jugadores importantes de la formación que conduce César Villarroel en el Torneo Regional.

El dolor de Luis Murúa

En las primeras horas de ayer, el exJefe de Policía de Chubut, Juan Luis Ale fue declarado culpable como autor material del delito de abuso deshonesto y sexual de dos menores. La deleznable situación toca de cerca al exentrenador de Jorge Newbery, Luis Ignacio Murúa. "A pesar que ese fallo representa una noticia buena, siento mucha culpa", dijo el técnico.

Los aberrantes hechos de abuso sexual por los que fue declarado culpable Juan Ale, se conocieron en el momento que Luis Murúa estaba trabajando en Jorge Newbery. El entrenador mantuvo una charla con el programa Conexión de FM La Petrolera y tuvo conceptos muy fuertes sobre un tema muy delicado.

Luis Murúa, es el padre de las dos niñas abusadas por el exjefe de la Policía del Chubut en el momento que Ale era pareja de la exesposa del técnico de futbol.

“Tengo culpa porque ellas me decían ´vos te dedicaste solamente al fútbol, pedazo de hijo de puta y nos dejaste en manos de cualquiera”, relató Murúa con mucha congoja.
“La verdad, que esta noticia es una bocanada de oxígeno para mis hijas y mi exesposa que fueron quienes vivieron este calvario. Hoy creo que se hizo Justicia, pero lo que pasó genera un trauma que si no se trata a tiempo puede llevar al suicidio. Este dolor no se cura esto, solo se alivia”, agregó.

El técnico de futbol comparó la situación de este modo: “prácticamente es un asesinato lo que este tipo cometió contra mis hijas de 9 y 10 años. De no haber sido por los psicólogos y psiquiatras, no sé si las chicas podrían haber llevado adelante la denuncia”.
A pesar de la noticia cuyo desenlace definitivo se conocerá el lunes 31 de agosto, cuando se conozca la pena para el depravado, Murúa dijo que: “yo no tengo alegría. Tengo mucho dolor porque vi mucho sufrimiento en mis hijas. Entraban en crisis y la verdad que no sabía qué esperar de la vida, las veía llorando, gritando y sollozando, diciéndome que no querían vivir más”.

“Yo sé que esto le pasa a un montón de mujeres. Uno tiene culpa y responsabilidad en esto. Tengo culpa porque mis hijas me decían ´vos te dedicaste solamente al fútbol, pedazo de hijo de puta y nos dejaste en manos de cualquiera. Este tipo eyaculaba en las bombachas nuestras´, ese era el relato de mis hijas”, contó con mucha crudeza, Luis Murúa.

“Acá es donde entra en juego la importancia del vínculo familiar con el papá y la mamá. Los padres deben estar siempre alertas y yo eso no lo hice. Siempre pensé que ya que no podía estar con ellas y que lo mejor que les podía pasar era estar con ese tipo. Eso me hace sentir una culpa inmensa, que no me la va a sacar nadie. Cuando el daño está hecho ya no hay cura. Por eso es tan importante evitar el daño”, completó el exentrenador de Newbery.