Chubut: Aprobaron una ley que prohibe a supermercados exhibir alimentos de alto nivel calórico en las cajas

Este martes, en la sesión desarrollada en la Legislatura de la provincia se aprobó una ley impulsada por la legisladora Xenia Gabella que prohíbe la exhibición de alimentos de alto valor calórico en cajas registradoras. La iniciativa busca combatir la obesidad, más teniendo en cuenta que, durante la cuarentena se registró un incremento de peso a nivel país por diferentes cuestiones.

En concreto, la ley sancionada en la Legislatura establece que los hipermercados, supermercados y mercados que tengan más de dos cajas registradoras no podrán exhibir alimentos de alta densidad calórica, es decir, aquellos que contengan azúcares y jarabe de maíz de alta fructosa. La legisladora Xenia Gabella, autora del proyecto, remarcó que la idea surgió por el incremento de obesidad que se registra a nivel país, con el foco puesto especialmente en la población infantil. “Los alimentos de alto contenido en sodio o glucosa son una tentación para los más chicos, dado que están a la vista”, dijo Gabella.

La ley sancionada en la provincia del Chubut viene de la mano con otro tema preocupante a nivel país: el incremento de peso registrado durante el aislamiento preventivo, social y obligatorio. No es una novedad que la gente, al estar encerrada en sus casas, come más y no precisamente por necesidad. En mayo de este año, la Sociedad Argentina de Nutrición advirtió que el aislamiento prolongado que demanda la pandemia genera angustia y ansiedad en la población y reduce significativamente la disponibilidad de alimentos saludables para consumir.

En el marco de la pandemia por Covid-19, la obesidad representa un claro riesgo para el ser humano. Según datos aportados por el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido, el exceso de peso puede complicar los cuadros de personas infectadas con Covid. Como dato complementario, se conoció que muchas personas que tuvieron cuadros graves al padecer el virus tenían obesidad.

Finalmente, hoy los diputados aprobarían en forma unánime la reestructuración de la deuda

Después de muchos tironeos, idas y vueltas, reclamos y reproches, chicanas y mucho más, al final los diputados provinciales aprobarían de manera unánime el proyecto del Gobierno sobre la reestructuración de la deuda provincial.

Desde la oposición habían declarado hasta el hartazgo que no estaban dispuestos a “dar un cheque en blanco” aprobando el proyecto como llegó desde el Ejecutivo. También desde el interbloque, es decir los legisladores que se apartaron -aunque no de manera formal- del oficialismo, también señalaban sus dudas.

En el medio se sucedieron numerosos reproches, críticas por fotos de poses en la nieve en el marco de la catástrofe climática, y muchas otras cosas más. Sin embargo, como por arte de magia, al parecer se solucionaron todos los problemas y hoy saldría de manera unánime el proyecto que facultará al Ejecutivo a comenzar a renegociar la deuda.

Muchos diputados habían señalado apenas días atrás que necesitaban tiempo para analizar el extenso informe que les brindó el ministro de Economía, Oscar Antonena. Pero, parece que no había muchas diferencias, teniendo en cuenta que solo en horas se habría decidido aprobar la iniciativa, aunque es cierto, habrá algunos cambios en el proyecto.

Es excelente que los dirigentes políticos y funcionarios -del Ejecutivo y del Legislativo- debatan, discutan y busquen el consenso, sobre todo respecto de un tema tan importante como el de la deuda provincial. Y está muy bien si hoy, al final, consideran que el proyecto oficial es coherente y lo aprueban.

Lo único cuestionable es haber pasado por todo lo que se pasó hasta hace apenas 48 horas atrás, con tantos “bombardeos” entre los sectores, incluso dentro del propio oficialismo. Hasta parecía que no había reconciliaciones posibles ni marcha atrás con ciertos alejamientos ¿Cómo quedan parados ante la comunidad?

Lo dicho: está muy bien si todos se ponen de acuerdo y priorizan los intereses de la comunidad por sobre lo partidario y particulares. Pero sería mejor aún si no se repite una historia como esta: queda claro que no había muchas diferencias.