Pidieron justicia por Ivanoff a un mes del homicidio que permanece impune
Unos 40 compañeros del docente Marcos Ivanoff se concentraron al pie del cerro Chenque y de los monumentos al Carrero Patagónico y el Papa Juan Pablo II, en el acceso al centro de la ciudad. Lo hicieron respetando las medidas sanitarias al cumplirse un mes del asesinato del docente y dirigente de la CTA y delegado también de la Regional Sur de ATECh.
“Marcos no era un compañero más, era un compañero único y no vamos a dejar que su muerte quede impune” señalaba una de las oradoras en la concentración que realizaron ayer acompañados en su mayoría por velas y al grito de “Justicia por Marcos Ivanoff” que luego acompañaron con una bandera desplegada para que la vean quienes ingresaban al centro de la ciudad que rezaba “Justicia para Marcos, trabajador docente” y unas pequeñas fotografías que luego pegaron en postes de luz y especialmente en la entrada al Ministerio Público Fiscal situado a pocos metros de la concentración, sobre calle Abásolo, frente a Prefectura.
El homicidio
Justamente, es la fiscal Cecilia Codina quien lleva la causa adelante conjuntamente con la División Policial de Investigaciones (DPI) a cargo del comisario Andrés García y subcomisario Pablo Lobos, quienes si bien en días posteriores al hecho realizaron cuatro allanamientos donde secuestraron elementos que podrían tener relación con la causa, no produjeron detenciones de posibles sospechosos.
Tal como se ha venido informando, el homicidio de Marcos Ivanoff se produjo alrededor de las 20 horas del pasado 2 de julio y se tomó conocimiento cuando el docente estrelló el vehículo en que se desplazaba contra el portón de un domicilio de calles Ricardo Balbín y Ramón Lorenzo.
Previo al accidente, vecinos de la cuadra dijeron haber escuchado detonaciones de armas de fuego. Se presume que a Ivanoff lo quisieron asaltar e intentó escaparse de los delincuentes que le dispararon desde atrás ya que de cuatro disparos, dos dieron en su humanidad, uno rozó el hombro derecho y el restante le entró por la cabeza desde atrás, quedando la luneta rota.
El hecho fue cometido en invierno, a las 8 de la noche y con nula o escasa gente en las calles que pudieran haber presenciado algo, por la cuarentena impuesta por el Covid 19.
Desde fiscalía reiteran el pedido de aquellos posibles testigos oculares que pudieran aportar datos de el o los autores del hecho, que se presenten en la DPI o en la misma fiscalía bajo estricta reserva de sus identidades. Por el momento, se trata de otro hecho de inseguridad pública más que permanece impune para la sociedad.
