Hay “una lluvia de denuncias” contra Massoni en la Justicia que podrían complicarlo

Trelew (Agencia) Si bien se dice en tribunales que no todas prosperarían, hay una verdadera “lluvia de denuncias” en la Justicia en contra del ministro de Seguridad Federico Massoni, y los fiscales tendrían que elegir a aquellas que tienen más sustento para impulsar y convertirlas en causas penales.

En su gran mayoría son excesos o extralimitaciones del funcionario. Aunque hay algunos hechos en los que la conducta del ministro sería rayana con ilícitos graves.
Como el caso de unos productores, que encima son vecinos de él, a los que habría confundido con ladrones y presuntamente les apuntó con un arma de fuego, bajándolos por la fuerza de un camión para terminar esposándolos.



El hecho ocurrió ya hace algunos meses pero en tribunales, ahora que se está comenzando a regularizar el trabajo, es uno de los casos de los que más se está hablando. Al momento de ese episodio, aparentemente, Massoni andaba acompañado del subjefe de Policía Gómez Ocampo y el supuesto procedimiento sucedió en la ruta 3 a Comodoro, a pocos kilómetros al sur de Trelew. La particularidad que tendría esta denuncia es que quienes acusan a Massoni -en su momento- quisieron desistir.

Hay denuncias que podrían complicar al ministro en la Justicia, pero pareciera que a él eso no le preocupa mucho por el momento y pese que ha trascendido de que ya habría recibido algunas notificaciones se está dedicando en estos últimos días a hacer unos videos en el barrio INTA (en donde la otra vez hubo la feroz represión policial contra vecinos), con los que intenta promocionar su imagen.

En uno, se hace filmar mientras unas mujeres -aparentemente admiradoras de su gestión- lo felicitan y le piden que no las abandone, y en otro, que originó polémica, un joven sin barbijo y violando la cuarentena le pide sacarse una foto con él; el ministro lo abraza, se retira el tapaboca y al despedirse le da la mano.

Entre las otras denuncias que podrían llevar a Massoni a la Justicia, estarían la que le hizo una psicóloga –al comienzo de la cuarentena- a quien la habría querido bajar a la fuerza del vehículo en un retén. La de un comerciante al que demoraron dos veces en un día y la de un enfermero al que el mismo Massoni pretendió detener en un control en la zona sur acusándolo de violar también el artículo 205 del Código Penal.