Recuperan cargamento de electrodomésticos robados el lunes en un depósito de La Loma
En contadas horas la División Policial de Investigaciones a cargo del comisario Andrés García y subcomisario Pablo Lobos pudieron lograr recuperar la totalidad de un millonario cargamento de electrodomésticos que habían sido sustraídos de un depósito de la calle Luis Marchiori al 1.700 -zona de La Loma- y que eran ofrecidos a la venta a través de las redes sociales como, por ejemplo, Facebook.
Los elementos robados consistían en los siguientes: una heladera marca Daewoo, otra heladera marca Patrick y una tercera heladera marca General Electric; un lavavajilla grande, un lavarropas, un freezer, una pileta de natación tipo Pelopincho, cajas de muebles tipo platinum sin uso, una cafetera comercial marca Simonelli, un molinillo de café marca Mahlkonig, una balanza y un microondas, entre otros elementos, los que estaban todos embalados.
Los ofrecían a la venta por redes sociales y les cayó la policía
Ya con la denuncia en sus manos y a través de páginas de ventas en las redes sociales, los sabuesos policiales pudieron detectar que dichos elementos se encontraban a la venta y lograron identificar a los titulares de los perfiles que las ofrecían.
Con esta información se solicitaron junto al funcionario fiscal Ricardo Carreño dos diligencias de allanamientos sobre los inmuebles ubicados en calle Código 651 (zona ilegal del Barrio San Cayetano), propiedad de la familia Raimapo. Dichas solicitudes fueron autorizadas por el juez penal de turno Mariano Nicosia y como resultado de las mismas, se logró recuperar la totalidad de los elementos malhabidos, logrando evitar un importante perjuicio económico para los dos damnificados del hecho.
Cabe destacar que momentos previos a realizar la diligencia de allanamiento, personal de Investigaciones que efectuaba consigna en el lugar, observó salir del interior del inmueble de la familia Reimapo una camioneta que cargaba una heladera idéntica a una de las denunciadas, lo que motivó que este rodado sea interceptado y se procedió al recupero también de este elemento que los malvivientes ya habían vendido a otra, por la irrisoria suma de 10.000 pesos. En definitiva, un nuevo golpe a la delincuencia que pegaron los hombres y mujeres que integran la DPI.
