Paciente con Covid-19 de Truncado pasó por Comodoro
Ayer el Ministerio de Salud y Ambiente de la Nación confirmó doce nuevos casos positivos de Covid-19 en Santa Cruz, uno de ellos es el primero en la localidad de Pico Truncado. La preocupación comenzó al conocerse datos del paciente, quien llegó recientemente de un viaje en el exterior y en el retorno a su ciudad pasó por Comodoro Rivadavia.
El intendente Juan Pablo Luque precisó ayer que el hombre estuvo en la ciudad el 18 de marzo, cuatro días antes de comenzar con los síntomas de Covid-19. El paciente llegó de España al aeropuerto de Ezeiza, en donde le hicieron una entrevista en un canal televisivo. Luego llegó al aeropuerto Gral. Mosconi de esta ciudad, desde allí tomó un remís hasta la Terminal de Ómnibus donde compró un pasaje en la agencia Sportman y tomó un colectivo hasta Pico Truncado que salió el 18 de marzo a las 15.
El hombre comenzó a presentar síntomas el 22 de marzo y recién ayer llegó el resultado de su prueba que resultó ser positivo para Covid-19. A raíz de esta situación, Luque hizo énfasis en que la comunidad cumpla con el aislamiento y con las medidas de limpieza y seguridad, dado que el hombre infectado estuvo en contacto con comodorenses: en el vuelo, en el aeropuerto, el remisero y en la terminal.
Asimismo en Santa Cruz buscan identificar a los pasajeros que compartieron viaje con el hombre, para que también cumplan con la cuarentena de catorce días y estén atentos en caso de presentar síntomas.
Quién es el paciente
A través de redes sociales se difundió la lista de pasajeros que compartieron colectivo con el paciente con Covid-19 de Pico Truncado, y de esta manera también se difundió su identidad. Se trata de Víctor Cingolani, famoso en la localidad e incluso en el mundo ya que fue uno de los acusados del femicidio de Johanna Casas y mientras cumplía condena, se casó con la hermana gemela de la mujer asesinada.
El cuerpo de Casas fue encontrado el 16 de julio de 2010 en un descampado, la joven era modelo y tenía 20 años. Por su muerte fueron detenidos la pareja de la mujer y Cingolani que era su ex. Este último fue condenado a 13 años de prisión. En 2013 protagonizó una boda polémica ya que estando en la cárcel se unió en matrimonio a la hermana de la mujer asesinada, aunque la familia presentó un amparo para impedirlo y los vecinos arrojaron piedras al transporte que llevó a Cingolani desde la cárcel hasta el registro civil. Ese mismo año un tribunal de Santa Cruz lo absolvió y fue liberado.
