Ráfagas de 90 km/h, cielo parcialmente nublado y algunas lluvias de verano

En el marco de un alerta meteorológico que se reiteró ayer, Comodoro Rivadavia cambió radicalmente su condición playera del lunes y ayer varió el paisaje climatológico entre vientos sostenidos, violentas ráfagas que superaron los 90 kilómetros por hora y desde el mediodía, una nubosidad que se fue acumulando sobre la ciudad para concluir durante la tarde con lloviznas y hasta breves pero fuertes lluvias que, afortunadamente, no provocaron inconvenientes.

No sucedió lo mismo en otros sectores del Chubut o en Santa Cruz, donde las precipitaciones fueron muy fuertes y en pocos minutos, lo que colapsó los sistemas de desagües y provocó inundaciones importantes para diversos barrios que, como en el caso de Río Gallegos, obligó a evacuaciones de familias y a reforzar medidas preventivas por marejadas inusuales, calificadas de históricas.

En nuestra ciudad, los fuertes vientos que se registraron desde la madrugada de ayer causaron desprendimientos de cartelería y la voladura de elementos que no fueron debidamente resguardados pese al aviso preventivo del Servicio Meteorológico Nacional, por lo que Miguel Bargas, en su rol de coordinador de Defensa Civil municipal, volvió a reiterar una serie de recomendaciones para evitar situaciones de riesgo.

Entre esas medidas preventivas y con el fin de evitar posibles accidentes, daños en vehículos o eventuales víctimas personales, se reiteró la importancia de asegurar elementos y materiales de construcción -especialmente en edificios de altura-, mantener techos y patios despejados de objetos que pudieran volarse como consecuencia de las violentas ráfagas, conducir con precaución y evitar caminar por la vía pública.

En cuanto a la intensidad del viento, la jornada de ayer se mantuvo con vientos constantes de entre 50 y 60 kilómetros por hora, con un registro máximo -en las primeras horas de la mañana- de ráfagas que llegaron a 91 km/h, lo que provocó desprendimientos o caída de cartelería aérea.