Organizadora de eventos puso una urna falsa y se robó el dinero, regalo de los invitados

El hecho ocurrió en Tafí Viejo, Tucumán. María Emilia Campos y Omar Horacio Acevedo decidieron implementar la modalidad de regalo en el que los asistentes directamente le ponían un sobre con la plata en un recipiente y la suma sería destinada para la luna de miel. Lo cierto es que nadie se dio cuenta que en el salón Quinta El Pacará 1 había dos urnas, de las cuales una había sido puesto por los ladrones.

Salón Quinta El Pacará 1

comentó la novia, quien al día siguiente de los festejos se sorprendió al visibilizar los pocos sobres teniendo en cuenta los 250 que participaron de evento. “Faltaban los sobres con los nombres de amigos que tenemos muchísima relación y decidimos, con mucha vergüenza, preguntarles qué había pasado. Es una situación incómoda para nosotros como para los invitados”, afirmó.

La respuesta arrojó a la luz la sospecha: habían puesto el sobre en el otro cofre. “La coordinadora de eventos puso una caja chiquita al lado de mi urna”, enfatizó la novia. La mujer, cual recepcionista, les decía a los invitados que pusieran el dinero en ese recipiente y si por ahí por la cantidad de billetes no entraban, ella misma lo abría para que depositen. La ruta del dinero estaba más que claro. Asimismo, para que la pareja no se diera cuenta, la quitaron antes de su ingreso.



“Faltaban los sobre con los nombres de amigos que tenemos muchísima relación y decidimos, con mucha vergüenza, preguntarles qué había pasado”, dijo María Emilia Campos, flamante esposa, víctima del engaño.

“En defensa al escrache social, el evento se desarrolló con la más absoluta normalidad. Desafortunadamente, los empleados realizaron una maniobra delictiva”, se defendió en un comunicado, la Quinta El Pacará .

María Emilia y Omar decidieron hacer la denuncia en el Ministerio Público Fiscal: “Ya es una causa penal que está en curso”. Ese mismo domingo, llamaron al dueño del salón y tanto él como la coordinadora de eventos negaron todo.

Según indicó la flamante esposa, el propietario les decía “que era una empleada de total confianza”. Sin embargo, después el hombre se comunicó con los novios y les dijo: “Sí, les robó, acaba de confesarme”.

A primera hora del lunes se reunieron con el dueño y la coordinadora. “Ella confesó lo que había hecho. Dijo que era la única responsable pero después confesó que fueron siete personas que se repartieron nuestro dinero”, detalló Campos. El dueño del salón les devolvió $60.000, parte del dinero, y les prometió que cuando ellos regresaran de luna de miel, les completaría el resto. El cálculo de lo robado lo hicieron de acuerdo al testimonio que fueron recogiendo de los invitados aunque el dueño del lugar dejó de responder. Además, aparecieron más parejas denunciando situaciones similares.