Diadema dio la nota al ganarle de visitante a San Martín

El futbol tiene imponderables que lo hace un deporte sin lógica. San Martín local, era claramente el favorito, sumado a las ausencias con que llegó Diadema a jugar su partido con un plantel con cuatro jugadores titulares ausentes, pero con más corazón que futbol se quedó con una victoria de cinco a tres en un partido raro, con poco futbol y con un montón de errores de ambos lados.

En los primeros once minutos Diadema ganaba tres a cero, para cerrar el primer tiempo con ocho goles, donde no hubo méritos de los delanteros, sino fallas defensivas y de arqueros no previstas en ninguno de los dos bancos. El mismo resultado fue poniendo un clima de intemperancia, de roces, de reclamos de afuera y desde adentro del campo de juego. Arrancó con dos goles de “avivada” Argentinos Diadema.

El primero a los cuatro minutos cuando Pardo en un tiro libre habilitó a Calculef para que el goleador definiera en el amanecer mismo del partido. Dos minutos más tarde un centro desde la izquierda del propio Calculef para que Axel Romero salte en soledad y anote de cabeza en la puerta del arco el segundo. Sobre diez minutos llegó el tercero, corrida por la izquierda. Remate hacia el arco, que da en el parante derecho de Sobarzo y nuevamente Axel Romero que llega para convertir sin objeción alguna. Tiro libre lejos del arco de Quilaqueo. Lo toma Manuel Gómez para meter un remate cruzado que sorprende al arquero visitante.

En el minuto 24 es Maximiliano Pardo el que aprovecha una pérdida en el mediocampo de Juan Cabrera, se la lleva un largo trecho, sin que le salga marca alguna. Resuelve sin mayor oposición, ante un indefenso arquero, para decretar el cuatro a uno. Más tarde un error de Joel Fernández en la salida, para que Marcos Bellido se la lleve en soledad y defina para el cuatro a dos. Todos a buscar el arco de Diadema era la premisa en San Martín. Vino un error en un despeje con los puños de Quilaqueo, cuyo rebote aprovechó muy bien Marcos Bellido para meter el descuento de cuatro a tres.

En el minuto cuarenta es Maximiliano Pardo el que toma un tiro libre fuera del área con remate que supera toda la barrera y se mete abajo del palo izquierdo de Sobarzo, para el cinco a tres. Partido sin contención en el medio y en donde los goles fueron más producto de errores del adversario, que mérito del oponente. El segundo tiempo fue también un compendio de discusiones, y de reclamos. Claro que en los segundos 45 minutos faltaron los goles. Lo buscó San Martín que fue el dominador del juego, pero sin poder concretar.

No pudieron aparecer sus hombres para vulnerar al improvisado arquero Nicolás Pinto que reemplazó al lesionado en el primer tiempo, Juan Quilaqueo. No tuvo mucho trabajo, salvo pelotazos largos y alguno que otro centro que supo cortar con algo de “oficio”. Diadema lo defendió con uñas y dientes. En muchas ocasiones aprovechando el apuro del rival, los nervios, jugando con el reloj y la ventaja de dos goles. Puso mucha gente para defender y solo Franco San Martín y en algunos tramos la llegada de Maximiliano Pardo fueron la única búsqueda del arco rival. San Martín tuvo errores y lo terminó pagando muy caro. Los tres goles de Diadema en los primeros diez minutos de juego, fue una diferencia que influyó demasiado en el resultado final