El Centro de Jubilados de YPF volvió a ser protagonista reivindicando el festejo petrolero
En el marco del 111 aniversario del descubrimiento del petróleo, el Centro de Jubilados y Pensionados de YPF volvió a convertirse en la institución anfitriona de una celebración que más allá de recordar la aparición del “oro negro”, se centró en los valores que, como comunidad de jubilados “podemos dar cuenta de cuánto hemos cuidado la institucionalidad de nuestras vidas, porque ese es el legado que dejaremos a las generaciones venideras. Cuidar nuestras instituciones es cuidar a nuestros hijos y nietos, reivindicando el festejo y la recreación en esta fecha, el encuentro y la celebración compartida”, según señaló Miguel Scarulli.
Luego y en el transcurso de su discurso, el presidente del Centro de Jubilados volvió a remarcar “la necesidad del encuentro, de gestos cálidos, del abrazo y de la palabra serena y respetuosa”, destacando que “celebrar nuestro petróleo es una referencia de que estamos vivos en la tierra que nos vio nacer, con la piel gastada por el viento y los ojos enrojecidos por la tierra pero siempre en ella y para ella; en Comodoro y en la Patagonia”.
Tras las sentidas palabras de Scarulli en las que apuntó a sostener un acto que el propio Centro de Jubilados realiza desde su fundación -hace 55 años- se realizó un reconocimiento a varios exypefianos o hijos de ypefianos que marcaron el tiempo o que siguen produciendo hitos dentro de la historia moderna de una comunidad que sigue estando presente, manteniendo vivo el ideario de Enrique Mosconi, particularmente el espíritu de aquella frase que se acuñó diciendo “entregar nuestro petróleo es entregar nuestra bandera”.
En ese marco, se entregaron plaquetas de reconocimiento a Daniel Alonso y Humberto Lovecchio, por su trabajo literario y el rescate del histórico hospital de Km. 3 en el libro “El Alvear”, y a otros históricos ypefianos que lograron su jubilación luego de toda una vida de esfuerzo que, sin desmerecer al actual petrolero, llevaba otra impronta de entrega al trabajo en condiciones muy duras, tanto por la crudeza meteorológica como por el transporte o las horas que el trabajador ypefiano le quitaba a la familia por cumplir sus tareas, tal el caso de José Lodo o Roberto Medori, algunos de los cuales fueron representados por su hija o por su esposa, dentro de la emotividad que le otorgó Scarulli al momento especial de la celebración por los 111 años del descubrimiento del petróleo.
