Truenos, relámpagos y fuerte precipitación en la tarde del último viernes de octubre

Si bien estaba pronosticada la posibilidad de lloviznas intermitentes para la jornada de ayer, una fuerte precipitación sorprendió -alrededor de las 14.30- a la ciudad toda y seguramente habrá provocado nerviosismo y temor a los vecinos que poco más de un año atrás, sufrieron las torrenciales lluvias que causaron destrozos en gran parte del ejido comodorense.

Truenos y relámpagos, al mejor estilo de tormentas norteñas, sumaron inquietud a la oscura tarde de una inusual primavera, mientras que el agua corría raudamente por las pendientes de la ciudad arrastrando basura suelta a su paso, sobrepasando cordones en algunos sectores e inundando veredas, sumando peligrosidad en las calles por los baches que quedaron ocultos, al igual que las zonas "en reparación" que, pese a las señalizaciones preventivas, prácticamente quedaron escondidas bajo un manto de agua.

Si bien no se anunció un registro oficial de la precipitación que no fue muy extensa en el tiempo pero sí muy fuerte por momentos, el caudal de agua caído causó temor entre los vecinos afectados por las últimas y grandes tormentas, aunque se aseguró que la magnitud de la lluvia no llegó a ser tan grave como para provocar inconvenientes mayores ni la intervención de los organismos municipales de seguridad, aunque sí se anunciaron suspensiones de eventos deportivos.

En cuanto a los pronósticos para el fin de semana, se prevén jornadas de neblina baja, humedad en un alto porcentaje y probables precipitaciones aisladas aunque, acorde a lo que debería ofrecer la estación primaveral, se espera un aumento considerable de temperaturas que, mientras las máximas de los últimos días apenas sobrepasaron los 11 o 12 grados, durante el día de hoy y durante la jornada dominguera, podrían superar los 20 y se ubicarían muy próximas a los 25 grados.