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Avanza la investigación sobre la posibilidad de administrar plasma inmune a pacientes con Hantavirus

lunes 28 de enero de 2019
Avanza la investigación sobre la posibilidad de administrar plasma inmune a pacientes con Hantavirus

El viernes último, uno de los directores del Instituto Nacional de Enfermedades Virales Dr. Julio Maiztegui (Inevh-Anlis), estuvo en Esquel para tomar muestras y avanzar en una de las líneas de investigación a partir del brote de Hantavirus ocurrido en Epuyén.

El ministro de Salud Adrián Pizzi confirmó que la presencia del directivo tiene que ver con la posibilidad de avanzar en protocolos específicos para determinar el comportamiento de la cepa Andes Sur del virus a partir de las particularidades que tuvo este año. El objetivo es encontrar un tratamiento al Síndrome Cardiopulmonar por Hantavirus que contagió a 31 personas hasta el momento, once de las cuales fallecieron. Precisamente, reducir la letalidad es el fin último de la investigación.

Se trata de una investigación incipiente, que llevará tiempo, por lo que no es una alternativa terapéutica que pueda usarse en este brote. Pero sí es este brote la posibilidad de desarrollar un hallazgo que cambie el paradigma en atención a pacientes con SPH.

Antecedentes

La administración de plasma inmune para Hantavirus es una de las alternativas terapéuticas que se estudiará y eventualmente desarrollará si los resultados de las investigaciones son los esperados por los especialistas del Instituto Maiztegui, con sede en Pergamino.

Hasta el momento, no existen vacunas ni tratamiento específico para el virus. La Organización Mundial de la Salud emitió un alerta la semana anterior donde, entre otras cosas, menciona que “el antivírico ribavirina no está aprobado para el tratamiento ni la profilaxis del SPH”.

Existen antecedentes de investigaciones en Chile donde en un estudio se logró reducir la letalidad del 35 al 17,1 por ciento, aunque dentro de un grupo limitado de pacientes. La idea es desarrollar en Argentina un estudio que permita actuar ante la mutación del virus.

Hanta sin superpoblación de ratas

La mutación del virus en Epuyén fue explorada a partir del modo de transmisión de virus, mediante el contacto persona a persona. La posibilidad de que hayan sido contagiados por la vía habitual (contacto con saliva o excretas del ratón colilargo) fue desvaneciéndose a medida que se conocían nuevos casos dentro de grupos familiares o contactos estrechos con pacientes en quienes ya se había detectado el virus.

Además, el Departamento de Zoonosis del Ministerio de Salud de Chubut, en conjunto con profesionales de la Secretaría de Salud de Nación, realizó una evaluación ambiental. La presencia de ratones colilargos no fue excepcional para que se produzca un brote de esta magnitud.

Se realizó un trampeo en las zonas de viviendas y peridomiciliarias tanto de la persona identificada como caso índice (primer paciente con el virus), como de quienes protagonizaron los casos posteriores. También se colocaron trampas en el salón de eventos donde se realizó la fiesta en la cual se produjo el contacto inicial.

En total, fueron 290 trampas con 21 capturas, de las cuales 18 resultaron negativas para hantavirus, 2 confirmadas y 1 probable, de acuerdo con las muestras de órganos y sangre remitidas al Instituto Malbrán.

A partir de este resultado, se empezó a trabajar más fuertemente en la hipótesis de un contagio interhumano que hasta este año había sido ocasional, y se afianzó la idea de una mutación en el virus.

De esta situación se desprende entonces la necesidad de abrir nuevas líneas de investigación que permitan tener un conocimiento científico con evidencia probada de lo que, hasta hoy, sigue siendo una sospecha.

 

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