Día del Trabajador del Seguro: la necesidad de cuidar el patrimonio
Hoy se conmemora, en Argentina, el Día del Trabajador del Seguro, fecha que celebra el inicio de las empresas y cooperativas que en la actualidad ofrecen cobertura para un número cada vez mayor y variado de circunstancias.
El origen se dio en plena conformación de la patria: cuenta la historia que el 21 de octubre de 1811, Bernardino Rivadavia envía al Tribunal del Consulado la primera iniciativa Gubernamental de crear un Banco de Descuentos y una Compañía de Seguros Marítimos.
Hay controversia respecto al protagonista central de este proyecto, que algunos historiadores atribuyen a Manuel Belgrano, quien había sido promotor de la creación de la primera aseguradora del Virreinato del Río de la Plata: La Confianza.
Desde 1944, cada 21 de octubre se conmemora el Día del Trabajador del Seguro, no solamente brindan cobertura durante un daño o siniestro además, cubren seguros de retiro, o estudios universitarios, entre otros.
Se trata de un grupo solidario de asegurados que con sus aportes, permite cubrir las eventualidades de quien ha sufrido un evento, es decir, un hecho único e imprevisto. Así, surgieron los seguros, y fue el transporte marítimo donde se originó esta práctica, cuando el daño o el naufragio provocaban la pérdida total de los mercaderes y decidieron conformar fondos comunes para enfrentar estas situaciones.
También entre los hombres de mar surgieron los seguros de vida, al asumir riesgos de vida que dejaban a sus deudos en la ruina. Y, con el tiempo y el desarrollo de las sociedades surgieron otras necesidades.
En la actualidad, hay varios aspectos de la vida y del patrimonio que cuentan con un seguro, como el seguro combinado familiar, el seguro de vehículos, de vida y salud, de accidentes personales, de retiro, de desempleo, de estudios, entre otros.
También las empresas pueden optar por seguros a sus vehículos o maquinarias, a sus empleados, a los cultivos en el caso de las empresas dedicadas al agro. Deportistas y artistas que trabajan con su cuerpo tienen la posibilidad de asegurar aquella parte de su anatomía sin la cual no podría seguir desarrollando su actividad.
Las coberturas van ampliándose y cambiando al ritmo de las necesidades de cada momento, con la supervisión de la Superintendencia de Seguros de la Nación y de la Superintendencia de Riesgo de Trabajo.
