Cristina Kirchner desmintió a Clarens: "Y pensar que decían que la loca era yo"

La exmandataria negó las declaraciones como arrepentido del financista, que aseguró que la expresidenta estaba al tanto de las coimas que cobró a empresarios.

Cristina Fernández de Kirchner volvió a cargar este martes contra el presidente Mauricio Macri por la situación económica y rechazó las declaraciones del financista Ernesto Clarens en la "causa de los cuadernos" respecto de su responsabilidad en las presuntas maniobras de pago de coimas en su gestión.

A través de su cuenta de Twitter, la expresidenta se refirió así a los dichos del líder de Cambiemos, que en una reunión de Gabinete afirmó que "sin Cambiemos en el Gobierno, esta tormenta hubiese destruido hasta el último cimiento de la Argentina como pasó hace 17 años", en alusión a la crisis de 2001.

"Macri dice que sin Cambiemos en el Gobierno esta tormenta hubiera terminado como en el 2001; y un ´arrepentido´ del planeta Bonadío, a quien no conozco y sólo escuché nombrar en televisión, dice que yo le daba órdenes. Y pensar que había algunos que decían que la loca era yo", escribió la senadora nacional por Unidad Ciudadana.

CFK también aludió a Clarens, el financista que —según trascendió— declaró ante el juez federal Claudio Bonadio que tanto el ex presidente Néstor Kirchner como ella "estaban al tanto" de la presunta recaudación de coimas. Dicha recaudación habría sido encomendada a través del empresario Lázaro Báez y el ex secretario de Obra Pública José López.

Según informaron fuentes judiciales, el dueño de la financiera Invernes declaró que recaudó $ 30 millones de pesos para el programa de viviendas de Madres de Plaza de Mayo Sueños Compartidos por orden del exsecretario de Obras Públicas José López, actualmente arrestado por haber sido encontrado con 9 millones de dólares en un convento de General Rodríguez.

Clarens también dijo que el dinero se lo entregó al secretario privado de Kirchner, Daniel Muñoz (fallecido en 2016) en el departamento de los expresidentes en Recoleta o en los hoteles Panamericano o Faena en habitaciones diferentes.