Detienen en Misiones a un hombre implicado en el homicidio del albañil Villalba
La muerte de Heriberto Villalba constituyó el homicidio más cruento de 2017. Lo secuestraron frente a su domicilio, le rodearon el cuello con un cable y lo obligaron a subir a su camioneta. Denunciaron su desaparición, lo buscaron durante una semana y finalmente fue encontrado en el baúl de un auto abandonado en el barrio Industrial. Había sido estrangulado y su cuerpo parcialmente desmembrado estaba completamente calcinado. Con esta detención, los dos presuntos involucrados, están a disposición de la justicia.
El procedimiento se hizo en forma conjunta entre la Brigada de Investigaciones local y la Dirección de Investigaciones Complejas de la ciudad de Posadas en Misiones. A las 9.00 de la mañana de ayer una comisión integrada por efectivos de ambas fuerzas y encabezada por el comisario mayor Salinas de esa ciudad se dirigió hasta un barrio periférico de Posadas para detener a Ariel Alberto Quiñones, quien es sindicado como coautor del homicidio del albañil Heriberto Villalba. Por esta causa ya se encuentra detenido cumpliendo tres meses de prisión preventiva y sindicado, también, como autor del homicidio, Roberto Antonio Ramírez (41).
El cuerpo calcinado, parcialmente desmembrado y con un cable alrededor del cuello fue encontrado el pasado 20 de diciembre, pero aparentemente la muerte de Villalba se produjo el 12 de diciembre cuando en horas de la mañana el hombre fue interceptado por Ramírez y Quiñones, en momentos en que abordaba su Renault Kangoo para ir a trabajar. Las cámaras de seguridad muestran el momento en que ambos hombres bajan del Toyota Corolla de Ramírez, lo interceptan, le envuelven el cuello con un cable y lo obligan a subir a su Kangoo. Ese día, al no tener noticias del hombre, una persona que trabajaba con él lo reporta como desaparecido y comienza la búsqueda que terminó el 20 de diciembre cuando encontraron el cuerpo. Hay que decir que el cuerpo tenía las llaves del portón del domicilio de Villalba y que aun tenía alrededor del cuello el cable con el que lo asfixiaron, tal como lo corroboró la autopsia.
Las imágenes que fueron claves
Las cámaras de seguridad, en las que trabajó la Brigada de Investigaciones mostraban no solo el momento en que fue secuestrado Villalba, sino también que los sospechosos dejaron el Toyota en ese lugar y se fueron con la víctima en la Kangoo. Otra cámara del barrio Industrial muestra el paso de la Kangoo por ese sector cuando se desvía hacia un camino de tierra, donde posteriormente fue encontrado el cuerpo dentro del baúl de un auto abandonado. También muestra cuando ambos individuos vuelven al domicilio de Villalba en la Kangoo y Ramírez desciende y sube a su Toyota, y ambos vehículos se van.
Por este hecho, luego de la detención de Ramírez solicitada por la fiscal general Cecilia Codina, pesaba una orden de captura a nivel nacional. Se sabía que tanto la víctima como Ramírez eran oriundos de Misiones y se sospechaba que el hombre que permanecía prófugo (Quiñones) también lo era. Ayer fue detenido en Posadas luego de un prolijo trabajo investigativo de la Brigada de Investigaciones que pudo conectar a los sospechosos con la víctima y con las imágenes y testimonios recabados. Este trabajo permitió ubicar a Quiñones en el lugar donde se mantenía oculto y detenerlo.
En la jornada de ayer se llevaban a cabo otras diligencias de allanamientos y toma de testimonios a algunos allegados y familiares tendientes a conocer el móvil del homicidio, que parece remitirse a un problema que los hombres traían desde su provincia natal. Por ahora, el personal de la Brigada trabaja a 2700 kilómetros de esta ciudad para esclarecer el homicidio de Villaba, que por sus características se convirtió en uno de los más cruentos que se registraron el año pasado.
Para este martes está prevista la llegada de Quiñones a esta ciudad, acompañado de la comisión policial que fue a buscarlo bajo las órdenes del juez penal Mariano Nicosia.
